A continuación se muestran algunos ejemplos de cómo se puede vincular el abuso emocional y económico:
1. El abusador puede controlar el acceso de la víctima al dinero mediante:
- Tomando el cheque de pago de la víctima
- Poner a la víctima en una asignación estricta
- Prohibir a la víctima trabajar fuera de casa.
- Exigir que la víctima rinda cuentas de cada centavo que gasta
2. El abusador puede sabotear la seguridad financiera de la víctima al:
- Maximizar sus tarjetas de crédito
- Acumular deudas a nombre de la víctima
- Obligar a la víctima a pedir préstamos que no puede pagar
- Destruir la propiedad de la víctima.
3. El abusador puede utilizar el abuso económico para aislar a la víctima al:
- Impidiéndoles conseguir un trabajo
- Hacerlos sentir culpables por gastar dinero en ellos mismos.
- Animándoles a cortar los lazos con sus familiares y amigos.
El abuso económico puede tener un impacto devastador en la vida de la víctima. Puede conducir a la pobreza, la falta de vivienda e incluso la muerte. También puede dificultar que la víctima abandone la relación, ya que puede depender económicamente del abusador.
Si está sufriendo abuso emocional o económico, hay recursos disponibles para ayudarle. Comuníquese con un amigo o familiar de confianza, o comuníquese con una línea directa o refugio contra la violencia doméstica.