Restauración de la vida de una ardilla voladora (a la vanguardia) en los entornos forestales de la región norte (Cataluña y sur de Francia) hace unos 10 millones de años Crédito:Oscar Sanisidro (Paleontología de Vertebrados. Instituto de Biodiversidad, Universidad de Kansas)
Los resultados de este estudio, publicado esta semana en Informes científicos Revelar los efectos del cambio climático en la biodiversidad del pasado a partir del análisis de cambios en la fauna con diferentes características ecológicas (hábitos alimentarios, preferencias de hábitat, etc.).
El estudio se centra en las faunas de roedores que habitaban la Península Ibérica hace entre 12 y 5 millones de años. Este período de tiempo es particularmente relevante para la evolución del clima pasado, ya que es un período de enfriamiento intenso junto con una mayor aridez a escala global. Esta tendencia global transformó radicalmente los paisajes del suroeste de Europa, que se volvió cada vez más árido.
"Recopilamos información de todas las especies de roedores presentes en más de 100 sitios fósiles en la Península Ibérica y el sur de Francia, que nos permiten evaluar estadísticamente cómo se agruparon estas comunidades de roedores en función de sus afinidades ecológicas. Luego, probamos cómo estas asociaciones se vieron afectadas por los cambios ambientales críticos que ocurrieron en la región hace entre 12 y 5 millones de años, "explica Fernando Blanco, investigador del Departamento de Geodinámica, Estratigrafía y Paleontología (UCM).
Este trabajo confirma la fuerte influencia de dos importantes eventos ambientales en las comunidades de mamíferos:la crisis vallesiana de hace 10 millones de años, y la crisis mesiniana de hace 6 millones de años, durante el cual casi toda la cuenca mediterránea quedó completamente drenada.
Durante el intervalo de tiempo estudiado, los cambios climáticos provocaron cambios de diversidad y distribución en las comunidades de roedores. “Uno de los principales resultados de este estudio es que las faunas más antiguas vinculadas a ambientes que estaban desapareciendo debido al aumento de la aridez fueron desplazadas hacia el norte, sobrevivir temporalmente en refugios locales con condiciones más húmedas, particularmente en la región de Cataluña y el sur de Francia, "dice Manuel Hernández Fernández, catedrático de la Universidad Complutense de Madrid y autor principal del estudio.
Los roedores son un grupo ideal para realizar investigaciones paleoecológicas:(1) se encuentran entre los grupos de mamíferos más diversos, (2) están ampliamente distribuidos geográficamente en una amplia gama de ecosistemas, y (3) son particularmente sensibles a los cambios ambientales. Es más, su registro fósil es extraordinariamente rico.
"En la Península Ibérica, el número de localidades fósiles con ricos conjuntos de roedores se cuentan por cientos, ", dice Fernando Blanco." Este estudio mueve el campo hacia estudios más completos que abarcan regiones geográficas más grandes y marcos de tiempo más largos para comprender con mayor detalle los efectos del cambio climático pasado en las faunas extintas, "dice Ana Rosa Gómez Cano del Institut Català de Paleontologia y coautora del artículo. Este estudio es el resultado de más de 50 años de experiencia en excavación e investigación en yacimientos fósiles de la Península Ibérica y el sur de Francia.
Este tipo de estudios son fundamentales para crear explicaciones, o incluso predictivo, modelos para anticipar los efectos que el cambio climático podría tener sobre la biodiversidad actual. "Al comprender en profundidad los efectos de las condiciones climáticas pasadas sobre la biodiversidad extinta, es posible que podamos anticiparnos a estas tendencias en el futuro. En este sentido, Creo que la paleontología tiene un papel crucial en el estudio del cambio global moderno, "dice Fernando Blanco.