- Están hechos de células. Todos los seres vivos están compuestos de células, que son las unidades básicas de la vida. Las células son las unidades estructurales y funcionales más pequeñas de los organismos vivos. Son responsables de todas las funciones de la vida, incluido el crecimiento, la reproducción y el metabolismo.
- Necesitan energía. Todos los organismos requieren energía para llevar a cabo sus procesos vitales. La energía es la capacidad de realizar un trabajo y se obtiene de los alimentos. Los organismos utilizan energía para crecer, reproducirse y moverse.
- Crecen y se reproducen. Todos los organismos crecen y se reproducen. El crecimiento es el proceso de aumentar en tamaño y complejidad. La reproducción es el proceso de producir descendencia.
- Responden a su entorno. Todos los organismos responden a su entorno. Esto significa que son capaces de sentir cambios en su entorno y realizar cambios en su comportamiento en respuesta a esos cambios.
- Mantienen la homeostasis. Todos los organismos mantienen la homeostasis, que es la capacidad de mantener constantes sus condiciones internas a pesar de los cambios en su entorno externo. La homeostasis es esencial para la vida y se logra mediante una variedad de mecanismos, como los circuitos de retroalimentación negativa.
Estas son sólo algunas de las características generales que se aplican a todos los organismos. Existe una gran diversidad de vida en la Tierra, pero todos los seres vivos comparten estas características fundamentales.