Un estudio de 2016 publicado en la revista "Preventive Veterinary Medicine" encontró que el 8,9% de los perros del Reino Unido mostraron algún tipo de agresión hacia los humanos u otros animales durante el año anterior. El estudio se basó en una encuesta realizada a más de 13.000 dueños de perros. Sin embargo, es importante señalar que este estudio no utilizó una definición estricta de agresión, y es posible que algunos de los comportamientos incluidos en la definición no sean considerados agresivos por todos los expertos.
Otro estudio, publicado en la revista "Applied Animal Behavior Science" en 2017, encontró que el 5,1% de los perros del Reino Unido mostraban agresión hacia los humanos. Este estudio utilizó una definición más estricta de agresión, que requería que el perro hubiera mordido o intentado morder a alguien en el pasado.
En general, la agresión no es infrecuente en los perros del Reino Unido, pero es importante tener en cuenta que la prevalencia de la agresión puede variar según la definición de agresión y la población estudiada. Además, hay una serie de factores que pueden influir en la probabilidad de que un perro muestre agresión, incluida la raza, el sexo, la edad, la socialización y el entrenamiento.