1. Sesgo subconsciente: Incluso cuando los revisores desconocen el género de los autores, aún pueden tener sesgos implícitos que pueden influir en sus evaluaciones. Estos sesgos pueden estar relacionados con estereotipos de género, experiencias previas o normas culturales. Por ejemplo, los revisores pueden asociar inconscientemente ciertos estilos de escritura o temas de investigación con un género en particular, lo que genera evaluaciones sesgadas.
2. Estilos de escritura y lenguaje según el género: Las elecciones de lenguaje y los estilos de escritura a menudo pueden tener matices de género, aunque sea sin querer. Los revisores pueden percibir ciertos patrones o estilos de lenguaje como más masculinos o femeninos, lo que puede afectar sus evaluaciones. Esto es especialmente preocupante en campos donde estilos de escritura específicos están asociados con ciertos géneros.
3. Representación limitada: La revisión ciega no aborda la cuestión subyacente del desequilibrio de género en ciertos campos o disciplinas. Cuando los paneles o comités de evaluación carecen de diversidad, hay mayores posibilidades de que los sesgos relacionados con el género no se controlen. Incluir una gama diversa de revisores puede ayudar a mitigar este problema.
4. Sesgo de red: La revisión ciega no elimina la influencia de las redes y colaboraciones profesionales, que pueden tener diferencias de género. Los revisores pueden estar más familiarizados con ciertos investigadores o colaborar con ellos, lo que puede dar lugar a evaluaciones sesgadas. Esto es particularmente relevante en campos donde la colaboración es esencial para el avance profesional.
5. Temas de investigación sobre género: Ciertos temas de investigación pueden percibirse como más masculinos o femeninos, y esta percepción puede influir en las evaluaciones. Los revisores podrían valorar más los temas tradicionalmente asociados con su propio género, lo que conduciría a resultados de género.
6. Cultura de revisión por pares: La propia cultura de la revisión por pares puede contribuir a resultados con perspectiva de género. Los revisores pueden ser más críticos con las investigaciones realizadas por mujeres, especialmente en campos donde las mujeres están subrepresentadas. Esto puede crear un entorno en el que las mujeres enfrenten mayores barreras para el reconocimiento y el avance.
Para abordar eficazmente los resultados de género, es necesario un enfoque integral. Además de la revisión ciega, las instituciones y organizaciones deben implementar las siguientes medidas:
1. Entrenamiento sobre prejuicios inconscientes: Educar a los revisores y a los tomadores de decisiones sobre los sesgos inconscientes y su impacto en las evaluaciones.
2. Diversos paneles de evaluación: Garantizar la diversidad en los paneles y comités de evaluación para aportar una variedad de perspectivas y reducir la influencia de los sesgos de género.
3. Criterios de evaluación claros: Desarrollar criterios de evaluación claros y transparentes que estén libres de supuestos de género.
4. Varios revisores: Utilice varios revisores para cada envío para reducir el impacto de los sesgos individuales.
5. Promover la equidad de género: Fomentar la equidad de género en el mundo académico y las instituciones de investigación para abordar las causas subyacentes de los resultados de género.
6. Prácticas de ciencia abierta: Fomentar prácticas de ciencia abierta, como el prerregistro de estudios y el acceso abierto a la investigación, para aumentar la transparencia y reducir la influencia de los sesgos.
Al implementar estas medidas junto con una revisión ciega, podemos crear un proceso de evaluación más equitativo y mitigar el impacto del sesgo de género en los resultados académicos y de investigación.