Antes de la era de los teléfonos inteligentes y las computadoras portátiles, la gente todavía usaba la tecnología para comunicarse, aunque a un ritmo más lento, con un invento de la Revolución Industrial llamado telégrafo eléctrico.
El telégrafo fue desarrollado en las décadas de 1830 y 1840 por Samuel Morse, junto con otros inventores. El grupo descubrió que al transmitir señales eléctricas a través de cables conectados a una red de estaciones, su nuevo telégrafo podía enviar mensajes de un lugar a otro a largas distancias. Los mensajes fueron "escritos" utilizando un código de puntos y rayas desarrollado por Morse, quien asignó un patrón específico a cada letra del alfabeto. La persona que recibe un telégrafo simplemente decodifica sus marcas en código Morse [fuente:Historia].
El primer mensaje que Morse envió en 1844, desde Washington, D.C., a Baltimore, indica su entusiasmo. Transmitió "¿Qué ha hecho Dios?", expresando que había descubierto algo grande. ¡Eso lo hizo! El telégrafo Morse permitía a las personas comunicarse casi instantáneamente sin estar en el mismo lugar [fuente:Senado de los Estados Unidos].
La información enviada por telégrafo también permitió a los medios de comunicación y al gobierno compartir información más rápidamente. El desarrollo del telégrafo incluso dio origen al primer servicio de noticias por cable, Associated Press. Con el tiempo, el invento de Morse también conectó a Estados Unidos con Europa, una hazaña innovadora y global en ese momento.