El estudio, publicado en la revista Nature Ecology &Evolution, encontró que las esponjas marinas han desarrollado una forma única de protegerse de las condiciones extremas que se encuentran en estos ambientes.
Los investigadores analizaron los genomas de las esponjas marinas y descubrieron que tienen varios genes implicados en la producción de proteínas y enzimas resistentes al calor. Se cree que estos genes ayudan a las esponjas marinas a resistir las altas temperaturas y presiones que se encuentran en las profundidades del mar y en los respiraderos hidrotermales.
Los investigadores también descubrieron que las esponjas marinas tienen varios genes responsables de la producción de sustancias químicas que pueden desintoxicar los metales pesados y otros contaminantes. Se cree que estos genes ayudan a las esponjas marinas a sobrevivir en los duros ambientes que se encuentran cerca de los respiraderos hidrotermales, donde el agua a menudo está contaminada con metales tóxicos.
Los hallazgos de este estudio son importantes porque proporcionan nuevos conocimientos sobre cómo la vida puede adaptarse a entornos hostiles. Los genes que permiten a las esponjas marinas sobrevivir en las profundidades del mar y en los respiraderos hidrotermales podrían usarse para desarrollar nuevas tecnologías que puedan usarse para proteger a otros organismos de condiciones extremas.
Aquí hay algunos detalles adicionales sobre el estudio:
* Los investigadores analizaron los genomas de 22 especies de esponjas marinas, incluidas especies que viven en las profundidades del mar, respiraderos hidrotermales, aguas poco profundas y arrecifes de coral.
* Descubrieron que los genes que protegen a las esponjas marinas de las duras condiciones están presentes en todas las especies de esponjas marinas, pero se expresan en diferentes niveles en diferentes especies.
* Los investigadores creen que la expresión de estos genes está controlada por factores ambientales, como la temperatura y la presión.
Este estudio es una contribución significativa a nuestra comprensión de cómo la vida puede adaptarse a entornos hostiles. Los hallazgos proporcionan nuevos conocimientos sobre la evolución de las esponjas marinas y podrían conducir al desarrollo de nuevas tecnologías que puedan utilizarse para proteger a otros organismos de condiciones extremas.