1. Erosión del viento:
* Deflación: Este es el tipo de erosión más común en los desiertos. Los fuertes vientos recogen y transportan arena y polvo sueltos, dejando atrás una depresión o "reventón".
* abrasión: La arena y el polvo transportado por el viento actúan como papel de lija, erosionando y suavizando las superficies. Esto es particularmente notable en las rocas expuestas, creando "Ventifacts" (rocas en forma de viento).
* Saltation: Los granos de arena rebotan a lo largo del suelo, impulsados por el viento, causando abrasión y transporte.
2. Erosión del agua:
* Inundaciones flash: Si bien es raras, las inundaciones repentinas pueden ser increíblemente poderosas en los desiertos. Tallan canales, transportan sedimentos y crean cañones.
* Erosión de la hoja: La lluvia ligera puede hacer que una lámina delgada de agua fluya a través de la superficie del desierto, erosionando el suelo y creando un "pavimento del desierto" de rocas expuestas.
* erosión de Gully: La lluvia más intensa puede tallar canales más profundos llamados barrancos, lo que lleva a una mayor erosión.
3. Erosión biológica:
* raíces de la planta: Las raíces vegetales pueden romper la roca y el suelo, contribuyendo a la erosión. Sin embargo, en muchos desiertos, la vida vegetal es escasa y su efecto erosivo es limitado.
* Actividad animal: Los animales excavadores como roedores e insectos pueden interrumpir la estructura del suelo y aumentar la erosión.
4. Otros tipos:
* Estrés térmico: Las fluctuaciones extremas de temperatura entre el día y la noche pueden hacer que las rocas se expandan y se contraen, lo que lleva a fracturación y erosión.
* meteorización química: Las reacciones químicas, como la oxidación, pueden descomponer las rocas y contribuir a la erosión.
Es importante tener en cuenta que erosión del viento es la fuerza dominante en la configuración de paisajes desérticos. Sin embargo, la interacción de todos estos factores da como resultado las características únicas y diversas que asociamos con los desiertos.