* Simplicidad: Los procariotas son más simples que las células eucariotas, que carecen de un núcleo y otros orgánulos complejos. Esto se alinea con la idea de que la vida temprana es menos compleja.
* entornos duros: La tierra temprana era un lugar muy diferente con temperaturas extremas, alta radiación UV y falta de oxígeno. Las arqueas, particularmente las que viven en respiraderos volcánicos o aguas termales, están bien adaptadas a tales condiciones.
* Flexibilidad metabólica: Algunas arqueas poseen vías metabólicas únicas, como el uso de sulfuro de hidrógeno o metano para la energía, que se cree que se parecen a los metabolismos primitivos de la vida temprana.
* Evidencia genética: El análisis genético muestra que las arqueas y los eucariotas comparten un antepasado común más reciente que las arqueas y las bacterias, lo que sugiere que los eucariotas evolucionaron a partir de una línea de arqueas.
Es importante tener en cuenta que las primeras células probablemente eran muy diferentes de cualquier organismo vivo hoy en día. Probablemente eran mucho más pequeños, tenían procesos metabólicos más simples y se reprodujeron de manera diferente. Sin embargo, estudiar extremosfilos como Archaea nos da información valiosa sobre las posibles características de esas formas de primera vida.