1. Encuestas:Las encuestas se pueden utilizar para preguntar a las personas sobre sus creencias y actitudes hacia diferentes grupos de personas. Los resultados de estas encuestas pueden utilizarse luego para cuantificar la prevalencia de los estereotipos.
2. Experimentos:Se pueden utilizar experimentos para comprobar si las personas realmente se comportan de acuerdo con sus estereotipos. Por ejemplo, los investigadores podrían realizar un experimento para ver si es más probable que las personas contraten a un hombre que a una mujer para un trabajo que tradicionalmente desempeñan los hombres.
3. Análisis de contenido:el análisis de contenido se puede utilizar para analizar la forma en que diferentes grupos de personas están representados en los medios. Por ejemplo, los investigadores podrían realizar un análisis de contenido de programas de televisión para ver con qué frecuencia se representa a las mujeres en roles estereotipados.
4. Estudios observacionales:los estudios observacionales se pueden utilizar para observar cómo las personas interactúan entre sí en entornos del mundo real. Por ejemplo, los investigadores podrían realizar un estudio observacional de un lugar de trabajo para ver cómo se trata de manera diferente a mujeres y hombres.