Algunos argumentan que las leyes sobre exposición indecente son una moda pasajera porque sólo han existido durante un período de tiempo relativamente corto. La primera ley de exposición indecente en los Estados Unidos no se aprobó hasta finales del siglo XIX, y las leyes no han hecho más que generalizarse en las últimas décadas. Esto sugiere que las leyes pueden ser un reflejo de normas sociales cambiantes más que un elemento permanente en el sistema legal.
Otros argumentan que las leyes sobre exposición indecente llegaron para quedarse porque cumplen un propósito importante. La exposición indecente puede ser una experiencia traumática para las víctimas y también puede conducir a otros delitos como agresión o agresión sexual. Las leyes sobre exposición indecente ayudan a proteger al público de estos daños.
En última instancia, es probable que la permanencia de las leyes sobre exposición indecente dependa de una serie de factores, incluidas las normas sociales predominantes, la tasa de criminalidad y la eficacia de las leyes para prevenir la exposición indecente.
Es importante señalar que las leyes contra la exposición indecente no son las mismas que las leyes contra la desnudez pública. La desnudez pública no se considera necesariamente una exposición indecente y los tribunales suelen tratar los dos tipos de leyes de manera diferente.