La hipermovilidad puede afectar cualquier articulación del cuerpo, pero se observa con mayor frecuencia en los dedos, las muñecas, los codos, los hombros, las rodillas y los tobillos. Las personas con hipermovilidad a menudo pueden doblar las articulaciones de maneras que la mayoría de las personas no pueden, como doblar los dedos completamente hacia atrás o doblar los codos por completo.
La hipermovilidad puede ser una condición inofensiva, pero también puede provocar problemas como inestabilidad, dolor y dislocaciones de las articulaciones. En algunos casos, la hipermovilidad también puede provocar artritis de aparición temprana.
Si cree que puede tener hiperlaxitud, es importante consultar a un médico para descartar cualquier afección médica subyacente. Su médico también puede recomendarle ejercicios para ayudar a fortalecer los músculos y apoyar las articulaciones.