* Se describe que el bosque tiene una "voluntad" y una "vida propia". . Richter escribe:"El bosque tenía una voluntad propia. Tenía sus propias formas de vida y su propia forma de morir, y era sabio, fuerte y paciente. No se apresuraba".
Esta declaración otorga al bosque cualidades de intención y propósito humanas, lo que hace que parezca casi sensible y capaz de un pensamiento independiente.