1. Edificios e Infraestructura: Los edificios y la infraestructura de las ciudades, como estructuras de hormigón, carreteras y estacionamientos, absorben y almacenan calor durante el día. Este calor se libera lentamente durante la noche, lo que contribuye a aumentar las temperaturas.
2. Falta de vegetación: Las zonas rurales suelen tener más vegetación que las ciudades. Las plantas liberan humedad mediante un proceso llamado evapotranspiración, que enfría el aire circundante. En las zonas urbanas, con menos vegetación, hay una evapotranspiración reducida, lo que resulta en condiciones más cálidas.
3. Densidad Urbana: Las ciudades están densamente pobladas, lo que conduce a un aumento de las actividades humanas, el tráfico y los procesos industriales. Estas actividades generan calor y contribuyen a temperaturas más altas.
4. Calidad del aire: Las zonas urbanas suelen tener una calidad del aire más baja debido al aumento de contaminantes y emisiones. Estos contaminantes, incluidos los aerosoles y las partículas, atrapan el calor y contribuyen a condiciones más cálidas.
5. Masa térmica: Los materiales comúnmente utilizados en el desarrollo urbano, como el hormigón y el asfalto, tienen una elevada masa térmica. Esto significa que absorben y retienen el calor de manera más eficiente que las zonas rurales con más vegetación y suelo, que tienden a perder calor con mayor facilidad.
6. Patrones de viento: Los edificios altos y las estructuras urbanas pueden alterar los patrones naturales del viento, lo que reduce la circulación del aire y aumenta la retención de calor. Este efecto es particularmente pronunciado durante condiciones climáticas estancadas.
7. Consumo de energía: Las ciudades consumen una cantidad significativa de energía para diversas actividades, incluido el transporte, la calefacción y la refrigeración. Este uso de energía genera calor, lo que contribuye al aumento general de la temperatura.
La intensidad del efecto isla de calor urbano puede variar dependiendo de factores como el tamaño, el clima y las características geográficas de la ciudad. Sin embargo, en general se observa que las zonas urbanas tienden a ser varios grados más cálidas que el campo, especialmente durante las noches y los meses de verano.