El retorno a tierra se utiliza a menudo en sistemas de distribución de energía, donde es necesario transmitir grandes cantidades de energía a largas distancias. Al utilizar la tierra como conductor de retorno, se reduce la necesidad de cables de cobre costosos y voluminosos. El retorno a tierra también se utiliza en algunos sistemas de telecomunicaciones, como las redes telefónicas y telegráficas.
Sin embargo, existen algunas desventajas al utilizar el retorno a tierra. Una desventaja es que la tierra no es un conductor perfecto, por lo que hay cierta pérdida de potencia debido a la resistencia. Otra desventaja es que la conductividad de la tierra puede variar dependiendo de las condiciones del suelo, lo que puede provocar que el circuito sea inestable.
En general, el retorno a tierra es una forma rentable y eficiente de transmitir energía y datos a largas distancias. Sin embargo, es importante ser consciente de las limitaciones de este método antes de utilizarlo.