Reflexión periódica , también conocida como reflexión especular, ocurre cuando los rayos de luz se reflejan desde una superficie lisa y plana en el mismo ángulo en que inciden en la superficie. Este tipo de reflexión produce un efecto de espejo, donde la luz reflejada forma una imagen distinta de la fuente.
Reflexión difusa , por otro lado, ocurre cuando los rayos de luz se dispersan en muchas direcciones al impactar sobre una superficie rugosa o irregular. Este tipo de reflexión no produce una imagen clara, ya que la luz reflejada se expande y dispersa en todas direcciones.
La superficie de un estanque normalmente no es lisa ni plana, sino más bien rugosa y desigual debido a la presencia de ondulaciones, olas y otras irregularidades. Como resultado, cuando la luz incide en la superficie de un estanque, sufre una reflexión difusa. La luz reflejada se dispersa en todas direcciones, creando una distribución uniforme de la intensidad luminosa sobre la superficie del estanque. Este reflejo difuso es lo que da a la superficie de un estanque su característico aspecto brillante.