Gélida recepción al plan para salvar el último glaciar de Venezuela
El gobierno de Venezuela ha anunciado planes para 'salvar' el glaciar La Corona que, según los expertos, ya ha desaparecido.
Una pequeña porción de hielo entre roca desnuda es todo lo que queda del último glaciar de Venezuela, que el gobierno espera restaurar a su antigua gloria utilizando una manta geotérmica.
Los expertos dicen que eso sería demasiado poco y demasiado tarde.
Si bien el derretimiento de los glaciares es un fenómeno global atribuido al cambio climático, Venezuela es el primer país de la cordillera de los Andes, que se extiende hasta Chile en el sur, en perder todos sus glaciares.
Venezuela ha perdido cinco en total, lo que suma unas 1.000 hectáreas de hielo, en el último siglo aproximadamente.
"En Venezuela ya no hay glaciares", dijo a la AFP Julio César Centeno, profesor universitario y asesor de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo (CNUMAD).
"Lo que tenemos es un trozo de hielo que tiene un 0,4 por ciento de su tamaño original".
Centeno y otros expertos están convencidos de que la pérdida del glaciar La Corona en el pico Humboldt, a unos 4.900 metros (más de 16.000 pies) sobre el nivel del mar, es irreversible.
Pero el gobierno anunció en diciembre un plan para frenar e incluso revertir el deshielo cubriendo el área con una malla térmica hecha de plástico de polipropileno que protege de los rayos del sol.
La cubierta fue entregada al pico Humboldt por helicóptero en 35 piezas separadas, cada una de las cuales mide 2,75 metros por 80 metros, en diciembre, pero el gobierno no ha dicho si ya ha sido desenrollada.