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Un nuevo artículo científico publicado en Frontiers in Marine Science llama la atención sobre la necesidad de una visión global del océano en el Acuerdo de Implementación sobre la Conservación y el Uso Sostenible de la Biodiversidad Marina de Áreas fuera de la Jurisdicción Nacional, que se está elaborando en el marco de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar. La quinta sesión de la conferencia intergubernamental sobre el Acuerdo se está llevando a cabo actualmente en Nueva York, del 15 al 26 de agosto de 2022.
"La necesidad de una visión oceánica global dentro de la biodiversidad más allá de la jurisdicción nacional:un papel clave para la evaluación ambiental estratégica" está escrito por Maria Adelaide Ferreira, Francisco Andrade, ambos profesores de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Lisboa (Portugal) e investigadores de el Centro de Ciencias Marinas y Ambientales (MARE)—y por David Edward Johnson, Director de Seascape Consultants Ltd., Reino Unido.
Como parte de las negociaciones en curso, en curso en las Naciones Unidas, de un nuevo acuerdo internacional para la conservación y uso sostenible de la biodiversidad marina en áreas fuera de la jurisdicción nacional, conocido como el Acuerdo BBNJ (Biodiversity Beyond National Jurisdiction), los autores de este artículo científico defiende la importancia de una visión global holística y basada en ecosistemas para el océano que guíe todas y cada una de las futuras políticas, planes y programas oceánicos. Los autores proponen que el texto del Acuerdo incluya disposiciones para que esta visión se desarrolle a través de un proceso de Evaluación Ambiental Estratégica (EAE).
Evaluación Ambiental Estratégica
SEA es un proceso de pensamiento estratégico, holístico y prospectivo, cuyo objetivo es orientar la toma de decisiones políticas hacia el desarrollo sostenible. Sin embargo, Maria Adelaide Ferreira explica:"Esta no es la práctica más común de la EAE, que se utiliza principalmente a posteriori, asemejándose a un proceso de evaluación de impacto ambiental, perdiendo así su valor estratégico".
Maria Adelaide Ferreira dice que la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, desarrollada en la década de 1970, que constituye el marco legal de este Acuerdo, "no responde plenamente a las necesidades actuales de conocimiento científico y gobernanza, es decir, en términos de protección de biodiversidad marina, particularmente en áreas fuera de la jurisdicción nacional".
Lo que los autores proponen en este artículo es que el texto del Acuerdo articule específicamente la necesidad de una visión global del océano, que se deriva de un SEA con base estratégica. Para sustentar esta idea, el artículo detalla los elementos esenciales en la construcción de esta visión global; analiza el potencial de un SEA en el marco del Acuerdo y los elementos clave que debería incluir; y enfatiza la oportunidad de la propuesta, publicada antes de la reunión en curso y alineada con un número creciente de propuestas que defienden la importancia de una visión global para el océano. Se necesita una mayor integración de las negociaciones internacionales para proteger el océano