El ciclo de roca
El ciclo de roca es un proceso continuo donde las rocas se transforman de un tipo a otro durante millones de años. Los tres tipos principales de rocas son:
* rocas ígneas: Formado a partir del enfriamiento y solidificación de la roca fundida (magma o lava).
* rocas sedimentarias: Formado a partir de la acumulación y cementación de sedimentos (como arena, barro o conchas).
* rocas metamórficas: Formadas cuando las rocas existentes (ígneas, sedimentarias o incluso otras rocas metamórficas) se transforman por calor, presión o reacciones químicas.
Cómo cambian las rocas
* ígneo a sedimentario: Las rocas ígneas se pueden resistir y erosionar, rompiendo en piezas más pequeñas. Estas piezas son transportadas por viento o agua y finalmente se depositan, formando rocas sedimentarias.
* sedimentaria a metamórfica: Cuando las rocas sedimentarias están enterradas bajo tierra, están sujetas a intensos calor y presión. Esto puede hacer que se recristalicen y cambien su textura y composición mineral, formando rocas metamórficas.
* ígneo a metamórfico: Las rocas ígneas también se pueden transformar en rocas metamórficas en condiciones similares de calor y presión.
* metamórfica a ígneo: Cuando las rocas metamórficas se derriten por un calor intenso, se convierten en magma. Este magma puede enfriarse y solidificarse, formando nuevas rocas ígneas.
* metamórfica a sedimentaria: Las rocas metamórficas pueden exponerse a la meteorización y la erosión, descomponiéndose en sedimentos que luego pueden formar rocas sedimentarias.
¡Es un ciclo!
El ciclo de roca es un proceso continuo, por lo que cualquier tipo de roca puede cambiar a cualquier otro tipo con el tiempo. Las transformaciones específicas dependen de los procesos geológicos involucrados.