1. Agua dulce :El agua dulce se refiere al agua con un bajo contenido de sal, generalmente menos de 1000 miligramos de sólidos disueltos por litro (mg/L). Incluye agua de fuentes como ríos, lagos, embalses, glaciares y acuíferos subterráneos. El agua dulce es esencial para el consumo humano, la agricultura y diversos procesos industriales.
2. Agua salada :El agua salada se refiere al agua con una alta concentración de sales disueltas, normalmente más de 10.000 mg/L. La masa de agua salada más importante de la Tierra es el océano, que contiene aproximadamente el 97% del agua de la Tierra. El agua del océano contiene varios minerales disueltos, incluido cloruro de sodio (sal de mesa), magnesio, calcio, potasio y sulfato.
3. Agua salobre :El agua salobre se sitúa entre el agua dulce y el agua salada en términos de salinidad. Normalmente tiene una concentración de sólidos disueltos entre 1.000 y 10.000 mg/L. El agua salobre se encuentra en los estuarios, donde los ríos desembocan en el océano, así como en algunos humedales costeros y acuíferos de aguas subterráneas salobres.
Además de estas categorías primarias, el agua de la Tierra también puede contener varios gases disueltos, como oxígeno, dióxido de carbono, nitrógeno y trazas de otros elementos y compuestos. La composición del agua puede variar según su fuente, ubicación y factores ambientales como la temperatura, las precipitaciones y las formaciones geológicas.
Vale la pena señalar que el agua en la Tierra experimenta constantemente un proceso llamado ciclo del agua, donde se mueve entre varios estados (sólido, líquido y gaseoso) e interactúa con diferentes componentes ambientales. Este ciclo juega un papel crucial en el mantenimiento del clima, los ecosistemas y los recursos hídricos de la Tierra.