* densidad: Los gases tienen densidades mucho más bajas que los sólidos y los líquidos. Esto significa que hay menos átomos o moléculas empaquetadas en el mismo volumen.
* Espacio: Los átomos y las moléculas en un gas están mucho más separados que en sólidos y líquidos.
Estos factores conducen a:
* Interacciones reducidas: Las partículas de radiación (como los fotones) tienen menos probabilidades de chocar con átomos o moléculas en un gas. Esto reduce la posibilidad de absorción o dispersión, lo que permite que la radiación pase más fácilmente.
* menos absorción y dispersión: Cuantas menos interacciones entre la radiación y la materia, menos probable es que sea absorbida o dispersa, lo que permite viajar más.
Piense en ello así: Imagine disparar balas a través de un bosque grueso (sólido), una densa multitud (líquido) y un campo abierto (gas). Es más probable que las balas golpeen algo y sean detenidas o desviadas en el bosque y la multitud, mientras que tienen muchas más posibilidades de pasar por el campo abierto.
Excepciones:
Si bien los gases generalmente ofrecen menos resistencia a la radiación, hay excepciones. Ciertos gases pueden absorber tipos específicos de radiación. Por ejemplo, el ozono en la atmósfera absorbe la radiación ultravioleta dañina.
En resumen: La baja densidad y el espaciado grande entre las partículas en los gases las hacen menos propensas a interactuar con la radiación, lo que permite que pase más fácilmente.