El artículo analiza el reciente documento del Vaticano que enfatiza la importancia de la educación sexual holística y el papel de la familia en la promoción de una sexualidad saludable. El documento también enfatiza que los sacerdotes no deben participar en ningún tipo de abuso o mala conducta sexual y, en cambio, deben priorizar sus deberes espirituales y el bienestar de sus comunidades.