Crédito:Bernadette Montanari
Desde 2005, los principales donantes han estado ampliando los programas de Marruecos para combatir la pobreza, exclusión social y desigualdad de género. Sin embargo, a pesar de los programas recientemente diseñados que abogan por enfoques participativos, empoderamiento e inclusión, las mujeres rurales no se integran fácilmente en la sociedad marroquí. Este artículo explora las últimas estrategias del Plan Marruecos Verde (GMP) y las estrategias de actividades generadoras de ingresos (IGA) que buscan apoyar el empleo y la autonomía de las mujeres rurales.
Desde 2005, los principales donantes han estado ampliando los programas de Marruecos para combatir la pobreza, exclusión social y desigualdad de género. Todavía, a pesar de los programas recientemente diseñados que abogan por enfoques participativos, empoderamiento e inclusión, las mujeres rurales sufren una marginación persistente en los programas de desarrollo. Este artículo explora las últimas estrategias del Plan Marruecos Verde (GMP) y las estrategias de actividades generadoras de ingresos (IGA) que buscan apoyar el empleo y la autonomía de las mujeres rurales.
Se realizaron entrevistas y grupos focales con mujeres en siete aldeas de la provincia de Rhamna y con informantes oficiales clave. El estudio muestra que la participación de las mujeres en las actividades generadoras de ingresos y los procesos de toma de decisiones de las cooperativas rurales es prácticamente inexistente y que el empoderamiento y la igualdad de género no se está desarrollando para las mujeres. Bastante, la participación de las mujeres en la gestión de cooperativas se limita a proporcionar mano de obra barata o incluso gratuita, mientras que sólo las personas alfabetizadas y educadas en general pueden beneficiarse económicamente de las estructuras cooperativas.