Fragmentos de hueso. Crédito:Claudio Cavazzuti, 2018
Antiguos restos humanos incinerados, a pesar de estar deformado, aún conservan características físicas de diagnóstico sexual, según un estudio publicado el 30 de enero, 2019 en la revista de acceso abierto MÁS UNO por Claudio Cavazzuti de la Universidad de Durham, Reino Unido y colegas. Los autores proporcionan un enfoque estadístico para identificar rasgos que distinguen los restos masculinos y femeninos dentro de una población.
La capacidad de determinar el sexo de los restos humanos antiguos es esencial para que los arqueólogos rastreen datos demográficos y prácticas culturales en todas las civilizaciones. Grandes surtidos de enterramientos pueden proporcionar muestras representativas de poblaciones antiguas, pero el proceso de cremación, que ha sido popular durante milenios, deformaciones y fragmentos de hueso, alterar las medidas esqueléticas que los arqueólogos podrían usar para sexar a un individuo. Pocos estudios han intentado identificar rasgos esqueléticos que sean sexualmente diagnósticos después de la cremación. Por lo tanto, Los arqueólogos carecen de un método confiable para sexar los restos incinerados en ausencia de pistas externas, como bienes funerarios de género.
Cavazzuti y sus colegas intentaron resolver esta deficiencia midiendo 24 rasgos esqueléticos en 124 individuos incinerados con bienes funerarios claramente engendrados (como armas para hombres y espirales de huso para mujeres) de cinco necrópolis italianas que datan entre los siglos XII y VI a. C. Suponiendo que el género se correlaciona en gran medida con el sexo, los autores compararon estadísticamente el sexo con la variación en los rasgos anatómicos. De los 24 rasgos examinados, ocho predicciones sexuales con una precisión del 80% o más, un puntaje de confiabilidad similar a los obtenidos para restos antiguos no cremados.
Los autores concluyen que la determinación anatómica del sexo es posible en restos cremados, aunque advierten que las medidas identificadas en este estudio difieren de las utilizadas para sexar los restos incinerados modernos, lo que indica que los rasgos de diagnóstico sexual difieren entre poblaciones a lo largo del tiempo y el espacio. Sin embargo, sugieren que, para poblaciones antiguas con muestras de gran tamaño, los métodos estadísticos utilizados en este estudio pueden diferenciar restos masculinos y femeninos.
Cavazzuti agrega:"Este es un nuevo método para respaldar la determinación del sexo de restos humanos cremados en la antigüedad. Fácil, replicable de confianza."