Los elementos tierra, aire, fuego y agua no fueron descubiertos por ningún individuo. Estos conceptos tienen su origen en sistemas filosóficos antiguos, como la filosofía griega clásica de Empédocles, quien creía que toda la materia podía reducirse a estos cuatro elementos fundamentales. La idea de estos cuatro elementos tuvo importantes significados culturales y simbólicos a lo largo de la historia, particularmente en la filosofía, la alquimia y la medicina tradicional de la antigua Grecia.