[Visual:Primer plano de un libro antiguo con páginas amarillentas]
Narrador: Los libros viejos tienen cierto olor. Es una mezcla de nostalgia, rancio y decadencia. ¿Pero qué causa ese olor? ¿Y podría ser realmente beneficioso?
[Visual:Científico en un laboratorio examinando libros]
Narrador: El olor de los libros viejos se debe a varios factores, entre ellos la rotura del papel, el cuero y el pegamento. También puede verse afectado por la presencia de moho y hongos.
[Visual:primer plano de la página del libro con texto resaltado]
Narrador: Si bien el olor de los libros viejos puede resultar desagradable para algunas personas, en realidad puede ser beneficioso para los libros mismos. Los compuestos liberados por los materiales en descomposición pueden ayudar a proteger el papel del deterioro.
[Visual:Científico analizando un compuesto químico]
Narrador: Los investigadores han descubierto que algunos de los compuestos liberados por los libros antiguos pueden inhibir el crecimiento de moho y hongos. Esto puede ayudar a preservar los libros y evitar que se dañen.
[Visual:Científicos discutiendo con libros sobre la mesa]
Narrador: Además de proteger los libros en sí, el olor de los libros antiguos también puede beneficiar a las personas que trabajan con ellos. Los compuestos liberados por los libros pueden ayudar a mejorar la calidad del aire y reducir el estrés.
[Visual:estantería llena de libros antiguos]
Narrador: Entonces, la próxima vez que huelas un libro viejo, tómate un momento para apreciarlo. No es sólo un signo de edad, es un signo de conservación.
[Visual:pantalla final con título y créditos del vídeo]