Las excepcionales orejas de Simba, cada una de las cuales mide la asombrosa cifra de 54 centímetros (21 pulgadas) de largo, lo han convertido en un fenómeno. La gente acude en masa a verlo desde todo Pakistán, ansiosa por vislumbrar este extraordinario animal que ha sido apodado la "CABRA" (el más grande de todos los tiempos) en términos de tamaño de oreja.
Las orejas de Simba cuelgan con gracia a su lado, casi tocando el suelo, una visión que provoca asombro y diversión entre quienes lo encuentran. Su dueño, Muhammad Hasan Narejo, se enorgullece de presumir de su querida mascota, que se ha convertido en un símbolo del orgullo local.
Narejo, que reside en el pueblo de Mithi en la provincia de Sindh en Pakistán, ha sido testigo de la repentina fama que Simba ha traído a su humilde morada. Los visitantes llegan a diario, incluidos equipos de medios, entusiastas de los animales y curiosos, todos ansiosos por conocer a la famosa cabra.
El fenómeno que rodea a Simba ha puesto patas arriba la vida de Narejo. Incluso ha comenzado a cobrar a los visitantes una pequeña tarifa por el privilegio de conocer a su famosa mascota. Con el dinero ganado planea ampliar su negocio ganadero.
Para Narejo, Simba es más que una cabra única; él representa la esperanza de un futuro mejor para su familia. La atención que ha despertado Simba ha aportado reconocimiento internacional a su pequeña aldea, poniendo a Mithi en el mapa y atrayendo potencialmente a más visitantes a la zona, lo que puede generar oportunidades económicas.
La historia de Simba subraya el poder de las maravillas de la naturaleza y la alegría que aportan a la vida de las personas. Esta extraordinaria cabra ha unido a la comunidad, brindando felicidad tanto a los lugareños como a los visitantes.