Así es como funciona:
* Erosión: El viento, el agua o el hielo descomponen rocas más grandes en piezas más pequeñas, incluida la arena.
* Transporte: Estas pequeñas piezas son llevadas por las fuerzas erosivas.
* Deposición: A medida que la fuerza erosiva se ralentiza (por ejemplo, el viento pierde energía, el río se ralentiza o el glaciar se derrite), la gravedad se hace cargo. Las piezas más pesadas se asientan primero, seguidas de las más ligeras. Este proceso de asentamiento se llama deposición .
La ubicación donde se depositan las piezas depende de las fuerzas en juego.
* ríos: Los ríos depositan sedimentos a lo largo de sus orillas, creando llanuras de inundación, o en la boca, formando deltas.
* viento: El viento lleva arena y crea dunas de arena.
* glaciares: Los glaciares depositan el sedimento a medida que se derriten, creando morrenas glaciales.
Entonces, mientras la erosión mueve la arena, la gravedad es la fuerza que finalmente determina dónde se trata de descansar.