1. Fósiles idénticos en continentes separados:
* mesosaurus: Este reptil de agua dulce se encontró en América del Sur y África. Su capacidad de natación limitada hizo imposible cruzar el vasto Océano Atlántico, lo que indica que estos continentes deben haberse unido en el pasado.
* Cynognathus: Este reptil de mamífero fue descubierto en América del Sur y África. Su naturaleza terrestre apoyó aún más la idea de que estos continentes alguna vez estuvieron conectados.
* Glossopteris Flora: Este fósil de planta distintiva se encontró en América del Sur, África, India, Australia y Antártida. Su presencia en estos continentes dispares apunta a una masa terrestre unificada en el pasado.
2. Formaciones geológicas coincidentes:
* Montañas: Las cadenas montañosas coincidentes en diferentes continentes, como las montañas de los Apalaches en América del Norte y las montañas Caledonias en Europa, sugieren que alguna vez fueron parte de un rango más grande que se dividió.
* Formaciones rocosas: Tipos de rocas similares y formaciones geológicas que se encuentran en diferentes continentes, como los depósitos glaciales en América del Sur y África, respaldan aún más la idea de un pasado conectado.
3. Distribución de especies fósiles:
* Patrones de distribución fósiles: La distribución de especies fósiles en los continentes no coincidía con los patrones geográficos actuales. Esta discrepancia sugirió que los continentes se habían movido, lo que condujo a la dispersión de las especies.
* Falta de fósiles: La ausencia de ciertas especies fósiles en algunas áreas, a pesar de su presencia en continentes aparentemente no conectados, reforzó la noción de deriva continental. Por ejemplo, la ausencia de ciertos fósiles de dinosaurios en Europa, pero su presencia en América del Norte y Asia sugirió una separación de masas de tierra.
En conclusión:
El descubrimiento de fósiles idénticos o similares en los continentes separados por vastas océanos, combinadas con formaciones geológicas coincidentes, proporcionó una fuerte evidencia de la teoría de la deriva continental. Estos fósiles contribuyeron al desarrollo de la teoría de la tectónica de placas, que explica los movimientos dinámicos de la litosfera de la Tierra y la formación de los continentes.