* Fuerzas de compresión :Cuando dos placas tectónicas chocan, una placa puede quedar presionada debajo de la otra en un proceso llamado subducción. A medida que las placas se mueven e interactúan entre sí, la inmensa presión y el calor hacen que las rocas se doblen, se doblen y finalmente se eleven, creando montañas.
* Fuerzas de extensión :En áreas donde las placas tectónicas se separan o se rompen, la corteza terrestre experimenta fuerzas de extensión. A medida que las placas se alejan unas de otras, la corteza se estira y adelgaza. Este estiramiento crea levantamientos a gran escala y conduce a la formación de montañas, como la provincia Basin and Range en los Estados Unidos.
* Cizallamiento y Colisión :Cuando las placas tectónicas se deslizan unas sobre otras, el corte y la fricción entre las placas pueden generar una enorme presión y elevación. Este tipo de levantamiento se asocia comúnmente con fallas de deslizamiento y puede dar lugar a cadenas montañosas empinadas y escarpadas. Por ejemplo, la falla de San Andrés en California es una famosa falla de deslizamiento que contribuye a la elevación de las montañas de Sierra Nevada.
* Fuerzas Magmáticas :Las fuerzas magmáticas desempeñan un papel en la formación de montañas cuando el magma o la roca fundida se eleva desde las profundidades de la Tierra y se acumula en la corteza. A medida que el magma se enfría y solidifica, puede empujar hacia arriba las capas de rocas suprayacentes, formando domos o montañas conocidas como domos volcánicos o estratovolcanes. El Monte Kilimanjaro en Tanzania y el Monte Fuji en Japón son ejemplos de montañas creadas principalmente por fuerzas magmáticas.
Estas fuerzas tectónicas, trabajando en combinación con otros procesos geológicos como la erosión, la erosión y la isostasia, dan forma y modifican las cadenas montañosas a lo largo de millones de años.