Las excavaciones en Birnin Lafiya desenterraron cientos de cuentas de vidrio importadas, muchas de las cuales podrían tener orígenes egipcios y de Oriente Medio, lo que ilustra la existencia de rutas comerciales a través del Sahara.
Además, los investigadores detectaron varios centros africanos distintos de fabricación de cuentas. Esto implica que las cuentas importadas se redistribuyeron y las cuentas elaboradas localmente se incorporaron a diversas redes comerciales africanas.
Esta evidencia arqueológica, combinada con historias orales, sugiere que la estabilidad y resiliencia a largo plazo de las políticas y mercados africanos estaban ligadas a su integración en redes internacionales de oro y cobre, así como de otros productos básicos.