1. Cristalización de la solución: Este es el método más común para cultivar cristales en un entorno de laboratorio. Implica disolver un sólido en un solvente (como el agua) para formar una solución. A medida que la solución se enfría o se evapora el disolvente, aumenta la concentración de la sustancia disuelta, alcanzando un punto donde se sobresaturada. El exceso de sustancia disuelta luego comienza a precipitarse de la solución, formando cristales.
2. Cristalización de Melt: Este proceso implica calentar una sustancia sólida a su punto de fusión, convirtiéndolo en un líquido. A medida que el líquido se enfría, sus moléculas comienzan a organizarse en una estructura más ordenada, formando cristales. Esta es la cantidad de piedras preciosas y minerales se forman en lo profundo de la corteza terrestre.
¡Avíseme si desea saber más sobre cualquiera de estos procesos!