- Adhesión :La capacidad de *Staphylococcus* para adherirse a las células y superficies del huésped es fundamental para la colonización y la infección. Producen varias adhesinas, como la proteína A (SpA), la proteína de unión a fibronectina (FnbP) y el factor de aglutinación, que les permiten unirse a las proteínas del huésped, las glicoproteínas y los componentes de la matriz extracelular.
- Formación de biopelículas :Las especies de *Staphylococcus* pueden formar biopelículas, que son comunidades densas y estructuradas de células encerradas en material extracelular de producción propia. Las biopelículas son muy resistentes a los agentes antimicrobianos y a las respuestas inmunitarias, lo que dificulta que el huésped elimine la infección.
- Sistemas de secreción :Las especies de *Staphylococcus* poseen varios sistemas de secreción, incluido el sistema de secreción tipo III (T3SS) y el sistema de secreción tipo VII (T7SS). Estos sistemas permiten a las bacterias translocar factores de virulencia, como toxinas, enzimas y proteínas efectoras, directamente a las células huésped.
- Detección de quórum :Las especies de *Staphylococcus* utilizan la detección de quórum, un mecanismo de comunicación entre células, para regular la expresión de factores de virulencia y coordinar su comportamiento en respuesta a la densidad de población bacteriana. Esto les permite sincronizar sus actividades y montar una infección más eficaz.
- Transferencia genética horizontal :Las especies de *Staphylococcus* pueden adquirir nuevos genes de otras bacterias mediante la transferencia horizontal de genes, facilitada por mecanismos como la conjugación, la transducción y la transformación. Esta capacidad les permite adaptarse a condiciones ambientales cambiantes y adquirir nuevos factores de virulencia, lo que contribuye a su capacidad para prosperar en diferentes entornos biológicos.