* La digestión puede desviar el flujo sanguíneo de las extremidades al estómago. Cuando come, su cuerpo desvía el flujo sanguíneo hacia su sistema digestivo para ayudar a descomponer los alimentos y absorber los nutrientes. Esto puede significar que hay menos sangre disponible para las extremidades, lo que puede hacer que se sienta cansado y débil. Si nada inmediatamente después de una comida abundante, es posible que no tenga suficiente energía para nadar de forma eficaz o segura.
* Puedes experimentar calambres o náuseas. Comer una comida abundante puede hacer que el estómago se expanda, lo que puede ejercer presión sobre el diafragma y dificultar la respiración. Esto puede provocar calambres o náuseas, que pueden resultar muy desagradables e incluso peligrosos al nadar.
* Es posible que sea más probable que aspire comida o agua. Cuando come, puede inhalar accidentalmente pequeñas cantidades de comida o agua. Esto se llama aspiración y puede ser muy peligroso si ocurre mientras nada. Si aspira comida o agua, podría desarrollar una infección pulmonar o incluso ahogarse.
Por estos motivos, generalmente se recomienda esperar al menos entre 30 minutos y 1 hora antes de nadar después de una comida copiosa. Esto le dará tiempo a su cuerpo para digerir los alimentos y reducirá el riesgo de sufrir problemas.