El primer paso para conseguir un buen bronceado es elegir el bikini adecuado.
- Para una máxima cobertura del bronceado, opte por un top de bikini triangular o bandeau y una braguita de bikini de talle bajo.
- Si buscas más sujeción, opta por un top sin mangas o un bañador de una pieza con aberturas.
- Asegúrate de que tu bikini esté hecho de un material que se seque rápidamente y permita que tu piel respire.
Paso 2:Prepara tu piel.
Antes de salir, prepare su piel para el bronceado exfoliándola e hidratándola. Esto asegurará que tu bronceado sea suave, uniforme y duradero.
- Utilice un exfoliante suave o un gel de baño para eliminar las células muertas de la piel.
- Aplique una crema hidratante que contenga protector solar para proteger su piel de los dañinos rayos UV del sol.
Paso 3:Aplicar protector solar.
Incluso si planeas broncearte, es importante proteger tu piel de los dañinos rayos ultravioleta del sol. Aplique un protector solar de amplio espectro con un SPF de 30 o más en toda la piel expuesta, incluidos la cara, el cuello y las orejas.
Paso 4:Broncearse gradualmente.
No intentes broncearte de una vez. Comienza bronceándote por periodos cortos de tiempo, aumentando gradualmente la cantidad de tiempo que pasas al sol a medida que tu piel se vaya acostumbrando. Evite broncearse durante más de 30 minutos seguidos y limite su exposición al sol a 2 o 3 veces por semana.
Paso 5:Tome descansos.
Es importante tomar descansos del bronceado para darle a la piel la oportunidad de descansar y repararse. Evite broncearse durante más de 2 días seguidos y asegúrese de mantenerse alejado del sol durante las horas más calurosas del día (de 12 a 4 p. m.).
Paso 6:Broncearse con moderación.
Broncearse con moderación está bien, pero es importante recordar que una exposición excesiva al sol puede dañar la piel y aumentar el riesgo de cáncer de piel. Trate de lograr un bronceado gradual y de apariencia natural y evite quemarse con el sol.
Paso 7:Cuidados posteriores
Después de broncearte, es importante cuidar tu piel.
- Enjuague con agua fría para eliminar la sal o el cloro.
- Hidrata tu piel para ayudarla a mantenerse hidratada y prevenir la descamación.
- Evita el uso de jabones o exfoliantes fuertes, ya que pueden irritar tu piel.
- Si tienes alguna quemadura solar, aplica una loción calmante o gel de aloe vera para ayudar a aliviar el dolor y la inflamación.