Una nueva investigación ha descubierto un patrón recurrente de parcialidad de los árbitros en el baloncesto universitario femenino.
El diario de comunicaciones de Howard estudio revela que, durante las diez temporadas de 2008 a 2017, Los árbitros calificaron un número desproporcionado de faltas personales contra jugadoras de baloncesto de colegios y universidades históricamente negras (HBCU) en comparación con las jugadoras de baloncesto de instituciones predominantemente blancas (PWI).
Los hallazgos se suman a la creciente evidencia de que la discriminación racial sigue siendo un problema en el deporte de hoy. En años recientes, Se han reportado varios ejemplos de alto perfil en ligas profesionales de todo el país, incluyendo la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL) y la Liga Nacional de Hockey (NHL).
Para aclarar si existe parcialidad en los árbitros en el baloncesto universitario femenino, El autor del estudio, el Dr. Andrew Dix, examinó datos de acceso público del sitio web de la Asociación Nacional de Atletismo Colegiado (NCAA). Los 333 equipos que jugaron cada temporada en la División 1 de 2008 a 2017 se incluyeron en el análisis:23 equipos de baloncesto universitario femenino clasificados como HBCU, y 310 equipos clasificados como PWI.
El Dr. Dix tabuló el número total de faltas personales por juego (PFPG) que los árbitros llamaron contra cada equipo individual, y calculó el promedio de diez años para cada equipo.
Los cinco equipos más penalizados durante estas diez temporadas fueron HBCU. En general, ocho de los 15 equipos más penalizados eran de HBCU, a pesar de representar menos del 7% de las universidades analizadas. De media, Los equipos de HBCU fueron llamados por 1.5 faltas personales adicionales por juego que los equipos de PWI.
Relativamente, los árbitros calificaron significativamente menos faltas personales contra jugadoras de baloncesto de PWI que las de HBCU, indicando un patrón recurrente de parcialidad del árbitro.
Esta nueva investigación significativa sugiere que los elementos del racismo todavía están incrustados en varias partes del tejido cultural estadounidense, y subraya cómo la desigualdad racial puede impregnar a los aficionados, así como a nivel profesional, deporte.
El Dr. Dix comentó:"Esta investigación revela evidencia de arbitraje defectuoso, y expone un problema sociocultural oculto en el que las jugadoras de baloncesto de colegios y universidades históricamente negras se encuentran en desventaja competitiva cuando entran a la cancha.
"Es imperativo dar voz a las jugadoras de baloncesto actuales y anteriores de colegios y universidades históricamente negras que han sido sometidas a esta forma de desigualdad racial en el baloncesto universitario femenino. Crear conciencia y fomentar un diálogo sobre esta iteración del sesgo de los árbitros es un paso importante para facilitar un cambio significativo en el arbitraje del baloncesto universitario femenino ".