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Un nuevo estudio publicado hoy en el Revista de investigación de confianza revela cómo las juntas directivas pueden abordar de manera proactiva la mala conducta de los directores ejecutivos para aumentar la confianza del público en una organización.
Los expertos evaluaron cómo los miembros del público podrían reaccionar ante dos respuestas diferentes iniciadas por la junta ante una transgresión del CEO:destituir al CEO, o mantener al director ejecutivo en su lugar mientras ofrece una disculpa y reconoce la irregularidad.
Descubrieron que ambas tácticas aumentaban la confianza hacia la organización, pero de diferentes formas. Al despedir al CEO, la tabla se diferencia del transgresor, dejando intacta la reputación de la organización. Sin embargo, en los casos en que el CEO deba quedarse, una disculpa del director ejecutivo solicitada por la junta, combinado con el reconocimiento del CEO de las irregularidades, anima a otros a ver al CEO como un 'pecador reformado', ayudando a reparar la confianza en la organización.
En ambos casos, la junta directiva tomó la iniciativa de manejar este tipo de crisis con autoridad para restaurar la fe en la organización.
Los autores sugieren que las juntas directivas deberían considerar la mejor manera de señalar que 1) el director ejecutivo culpable es distinto del resto de los líderes superiores (que se supone digno de confianza), o 2) que el CEO ha aprendido una lección del evento y será un líder reformado en el futuro.
Coautor del estudio, Profesora Cecily D. Cooper, comentó:"Transgresiones del CEO, como el uso de información privilegiada, desvío de fondos corporativos para uso personal, o comportamiento personal inapropiado, son una historia lamentablemente común en la prensa empresarial actual. Descubrimos que las acciones tomadas por la junta directiva son fundamentales para abordar la mala conducta de los directores ejecutivos.
"La junta puede enviar diferentes señales a través de tácticas como despedir al CEO errante u obligarlo a disculparse y pagar un costo personal. Este tipo de acciones son clave para reparar la confianza en la organización asociada del CEO, e incluso el propio CEO en los casos en que el CEO deba quedarse.
"Cualquiera de estas estrategias puede abordar la infracción y comenzar a reconstruir la confianza, pero si el director ejecutivo necesita permanecer en la empresa, la última estrategia (enfatizando el arrepentimiento del CEO) necesita ser adoptada ".
Para producir sus hallazgos, los investigadores establecieron un estudio experimental con 87 participantes, que reprodujo una violación de confianza en la vida real por parte de un director ejecutivo de una empresa líder de Fortune-500. Luego analizaron las respuestas de los estudiantes universitarios a las dos tácticas diferentes dirigidas por la junta, que fueron probados a través de una serie de videos y artículos periodísticos.