1. Temperaturas extremas:
* frío: Las temperaturas por encima de la línea de madera son consistentemente bajas, a menudo por debajo de la congelación durante períodos prolongados. Esto inhibe el crecimiento de la mayoría de las especies de árboles, mientras luchan por fotosintetizar y transportar agua en condiciones tan frías.
* Frost: Las heladas frecuentes pueden dañar los delicados tejidos vegetales, lo que dificulta la sobrevivir para los árboles.
2. Breve temporada de crecimiento:
* luz solar: La temporada de crecimiento por encima de la línea de madera es corta, generalmente solo unos pocos meses. Esto limita la cantidad de tiempo que los árboles tienen que crecer y producir semillas.
* nieve: Las fuertes nevadas y la cubierta de nieve también pueden acortar la temporada de crecimiento, ya que evita que la luz del sol llegue a los árboles.
3. Disponibilidad de agua limitada:
* permafrost: El suelo sobre la línea de madera a menudo se congela permanentemente (permafrost), lo que dificulta que los árboles accedan al agua.
* viento: Los vientos fuertes pueden aumentar la evaporación, limitando aún más la disponibilidad de agua.
4. Vientos fuertes:
* Daño: Los vientos fuertes pueden dañar físicamente los árboles, romper ramas o incluso desarraigarse.
* Exposición: El viento también puede eliminar el suelo, dejando los árboles expuestos a condiciones duras.
5. Suelo delgado:
* Nutrientes: El suelo sobre la línea de madera a menudo es delgado y carece de nutrientes, lo que dificulta que los árboles se establezcan y crecen.
6. Radiación ultravioleta:
* Daño: Las altitudes más altas exponen los árboles a niveles más altos de radiación ultravioleta, lo que puede dañar sus hojas e inhibir el crecimiento.
En esencia, la línea de madera representa el límite de donde los árboles pueden sobrevivir y reproducirse en las condiciones duras presentes en elevaciones más altas.