1. Inundación del río: Imagine una fuerte tormenta en una zona montañosa. La lluvia cae sobre las laderas y fluye hacia un río, haciendo que el nivel del agua aumente rápidamente. El río desborda sus orillas, inundando campos cercanos, ciudades e incluso hogares.
2. Inundación costera: Una poderosa marea tormenta, impulsada por un huracán o fuertes vientos, empuja el agua del océano hacia el interior. Esto puede abrumar áreas costeras, inundar calles, empresas e incluso comunidades enteras.
3. Inundación flash: Un aguacero repentino en un área seca puede provocar inundaciones repentinas. El agua no tiene a dónde ir, por lo que rápidamente se acumula y se apresura cuesta abajo, a menudo causando daños extremos en poco tiempo.
4. Inundación de falla de la presa: Una presa puede fallar debido a problemas estructurales, desastres naturales o incluso error humano. Cuando esto sucede, se libera una gran cantidad de agua a la vez, lo que lleva a inundaciones catastróficas aguas abajo.
Estos son solo algunos ejemplos. Las inundaciones pueden ser causadas por muchos factores, y sus efectos pueden variar mucho dependiendo de la ubicación, la gravedad y el tipo de inundación.