- Hojas en forma de aguja:Las hojas en forma de aguja, como las que se encuentran en muchas coníferas, pueden reducir la superficie de la hoja expuesta al frío y, por tanto, reducir la pérdida de agua por transpiración durante los fríos meses de invierno.
- Corteza gruesa:Actúa como aislante para proteger el cambium del árbol del frío extremo.
- Recubrimientos cerosos en hojas y tallos:estos recubrimientos ayudan a prevenir la pérdida excesiva de agua en las condiciones frías y secas de la taiga.
- Tasa de crecimiento reducida:Esto permite a las plantas conservar energía durante el duro invierno cuando los recursos son limitados.