El estudio, publicado en la revista "Ecology and Evolution", analizó el crecimiento y la supervivencia de los renacuajos en dos tipos diferentes de estanques:uno con depredadores y otro sin ellos. En el estanque sin depredadores, los renacuajos grandes tenían más probabilidades de sobrevivir y metamorfosearse en ranas. Sin embargo, en el estanque con depredadores, los renacuajos grandes tenían menos probabilidades de sobrevivir.
Los investigadores creen que esta diferencia se debe al hecho de que los renacuajos grandes son más visibles para los depredadores. Esto significa que es más probable que sean devorados por depredadores antes de que puedan metamorfosearse en ranas.
El estudio también encontró que la relación entre el tamaño de los renacuajos y la metamorfosis era diferente para los renacuajos machos y hembras. En el estanque sin depredadores, los renacuajos machos grandes tenían más probabilidades de sobrevivir y metamorfosearse en ranas, pero no así las hembras grandes. En el estanque con depredadores, los renacuajos hembras grandes tenían más probabilidades de sobrevivir y metamorfosearse en ranas, pero no los renacuajos machos grandes.
Los investigadores creen que la diferencia entre renacuajos machos y hembras se debe al hecho de que los renacuajos machos crecen más rápido y alcanzan su tamaño adulto antes que las hembras. Esto significa que son menos vulnerables a los depredadores y pueden metamorfosearse en ranas más rápidamente.
En general, el estudio encontró que la relación entre el tamaño del renacuajo y la metamorfosis es compleja y puede verse afectada por una serie de factores, incluido el medio ambiente y el sexo del renacuajo.