Cambios en las precipitaciones: El cambio climático también está provocando cambios en los patrones de precipitaciones en Colombia, lo que está afectando la disponibilidad de agua para los cafetos. Las sequías son cada vez más frecuentes y graves, mientras que las fuertes lluvias pueden provocar inundaciones y erosión. Estos cambios en los patrones de precipitación están dificultando que los cafetaleros planifiquen sus cultivos y administren sus recursos hídricos.
Aumento de plagas y enfermedades: El cambio climático también está provocando la propagación de plagas y enfermedades que pueden dañar los cafetos. Por ejemplo, el hongo de la roya del café, que puede causar pérdidas significativas en el rendimiento del café, se está volviendo más común en Colombia debido al aumento de las temperaturas y la humedad.
Pérdida de biodiversidad: El cambio climático también está provocando la pérdida de biodiversidad en Colombia, lo que puede tener un impacto negativo en la producción de café. Por ejemplo, la pérdida de árboles de sombra, que brindan protección a los cafetos contra el sol y el viento, puede hacerlos más vulnerables a plagas y enfermedades.
En general, el cambio climático está teniendo un impacto significativo en la producción de café en Colombia. Es probable que estos impactos se vuelvan más severos en el futuro, lo que podría tener un impacto devastador en la industria cafetera colombiana.