He aquí por qué:
* Muchos minerales pueden venir en una variedad de colores: Las impurezas de trazas o los ligeros cambios en la composición química pueden alterar drásticamente el color de un mineral. Por ejemplo, el cuarzo puede ser claro, rosa, morado, ahumado, lechoso o incluso negro.
* El color puede ser engañoso: Algunos minerales con diferentes composiciones pueden compartir el mismo color. Por ejemplo, la pirita (un sulfuro) y el oro (un elemento) aparecen amarilla.
* La meteorización y la alteración pueden cambiar el color: La exposición a los elementos puede alterar el color de la superficie de un mineral, por lo que no es confiable para la identificación.
Si bien el color puede ser un punto de partida para la identificación, es importante considerar otras propiedades como la racha , el brillo, la dureza, la escisión, la fractura y la forma de cristal para una determinación más confiable.