1. Silicatos: Estos son el grupo más abundante, que representa más del 90% de la corteza terrestre. Se caracterizan por la presencia de silicio y oxígeno en su estructura química. Los ejemplos comunes incluyen cuarzo, feldespato, mica y olivina.
2. Carbonatos: Estos minerales están compuestos de iones 2 de carbonato (CO3). Se encuentran comúnmente en rocas sedimentarias y son componentes importantes de piedra caliza y mármol. Los ejemplos incluyen calcita, dolomita y magnesita.
3. Óxidos: Estos minerales contienen oxígeno en su estructura química, a menudo combinadas con metales. Son comunes en rocas ígneas y metamórficas. Los ejemplos incluyen hematita, magnetita y corundum.
4. Sulfuros: Estos minerales contienen azufre combinado con otros elementos, principalmente metales. A menudo se encuentran en las venas hidrotérmicas y son fuentes importantes de minerales. Los ejemplos incluyen pirita, calcopirita y galena.
5. Sulfatos: Estos minerales contienen iones 2 de sulfato (SO4). A menudo se encuentran en rocas sedimentarias y son componentes importantes del yeso y la anhidrita. Los ejemplos incluyen yeso, barite y celestite.
6. Haluros: Estos minerales contienen iones de haluro, como cloruro (Cl-), bromuro (Br-) y fluoruro (F-). Se encuentran comúnmente en rocas y evaporitas sedimentarias. Los ejemplos incluyen halite, sylvite y fluorita.
7. Fosfatos: Estos minerales contienen iones 3 de fosfato (PO4). Son componentes importantes de los fertilizantes y a menudo se encuentran en rocas sedimentarias. Los ejemplos incluyen Apatite, Monazite y Vivianite.
8. Elementos nativos: Estos minerales consisten en un solo elemento, como oro, plata, cobre, azufre y diamante. A menudo se encuentran en las venas hidrotérmicas y como depósitos de placer.
Es importante tener en cuenta que esta lista no es exhaustiva y hay muchos otros grupos minerales, aunque menos comunes. Sin embargo, estos ocho grupos representan los minerales más abundantes y ampliamente distribuidos de la Tierra.