Propiedades físicas:
* Color: Esto es a menudo lo primero que se notó, pero puede ser engañoso ya que algunos minerales vienen en una variedad de colores.
* Streak: El color del polvo del mineral cuando se frota contra una placa de racha. Esto a menudo es más confiable que el color.
* Dureza: Medido usando la escala de dureza de Mohs, que compara la resistencia del mineral con el rascado.
* escote y fractura: La forma en que un mineral se rompe a lo largo de planos específicos (escisión) o en un patrón irregular (fractura).
* Luster: Cómo la luz se refleja en la superficie del mineral (por ejemplo, metálico, vidrioso, terroso).
* Forma de cristal: La forma de los cristales del mineral, que puede ser un identificador único.
* Gravedad específica: La densidad del mineral en comparación con el agua.
* Magnetismo: Si el mineral se siente atraído por un imán.
Pruebas químicas:
* Prueba de ácido: La caída del ácido clorhídrico diluido en ciertos minerales, como la calcita, los hará efervescentes.
* Prueba de llama: Calentar el mineral en una llama producirá un color característico dependiendo de la composición del mineral.
* Análisis químico: Se pueden utilizar técnicas más avanzadas como la difracción de rayos X, la microprobios electrónicos y el análisis químico para determinar la composición química exacta del mineral.
Otras pruebas:
* Propiedades ópticas: Observando cómo la luz interactúa con el mineral bajo un microscopio.
* Fluorescencia: Algunos minerales brillan bajo luz UV.
Es importante tener en cuenta que ninguna prueba única es definitiva, y a menudo se usan múltiples pruebas para confirmar la identidad de un mineral. La experiencia y una combinación de pruebas son cruciales para una identificación precisa.