La astenosfera es una capa semi-líquida del manto superior, ubicada debajo de la litosfera (que incluye la corteza y la parte superior del manto). Se caracteriza por su capacidad para deformarse y fluir durante períodos muy largos debido a la inmensa presión y calor dentro de la tierra. Este flujo permite que las placas tectónicas rígidas se muevan a través de su superficie, lo que lleva a los fenómenos que vemos como terremotos, erupciones volcánicas y construcción de montaña.