Los sumideros pueden formarse por una variedad de procesos, pero el más común es la disolución de roca soluble, como piedra caliza o yeso, por agua subterránea ácida. A medida que la roca se disuelve, crea cavidades bajo tierra. Finalmente, estas cavidades pueden volverse lo suficientemente grandes como para apoyar el terreno suprayacente, lo que lleva a un colapso y la formación de un sumidero.
Los sumideros también pueden formarse por otros procesos, como:
* Subsidencia :Esto ocurre cuando el suelo se asienta debido a la eliminación del soporte subterráneo, como la extracción de minería o petróleo y gas.
* Erosión :Esto puede ocurrir cuando el agua o el viento erosionan el suelo y la roca, lo que lleva a la formación de una depresión en el suelo.
* Actividad sísmica :Los terremotos pueden desencadenar temblores de tierra que pueden conducir al colapso de las cavidades subterráneas y la formación de sumideros.
Los sumideros pueden variar en tamaño desde pequeñas depresiones hasta grandes cráteres. También pueden ser peligrosos, ya que pueden tragar edificios, vehículos e incluso personas.