climas que promueven la durabilidad del granito:
* climas áridos: Los climas secos y desérticos son ideales para granito. La falta de humedad minimiza los procesos de meteorización como la cuña de las heladas y las reacciones químicas que pueden degradar la roca.
* climas fríos (con poca congelación): Si bien el frío extremo puede causar cierta expansión y contracción, la baja porosidad del granito lo hace relativamente resistente al daño por heladas.
* climas estables: Los climas con poca fluctuación de temperatura y patrones de lluvia consistentes tienen menos probabilidades de enfatizar la roca y causar meteorización.
climas que pueden acelerar la meteorización de granito:
* climas húmedos: La alta humedad promueve procesos de meteorización química como la hidrólisis y la oxidación, lo que puede debilitar el granito con el tiempo.
* climas costeros: El rocío de sal y los ciclos constantes de condiciones húmedas y secas contribuyen a la descomposición del granito, especialmente cerca de la costa.
* clima con ciclos frecuentes de congelación-descongelación: El agua se expande cuando se congela, y esta expansión puede causar grietas en el granito, especialmente si existen fracturas existentes.
* ambientes ácidos: La lluvia ácida u otros contaminantes ácidos puede reaccionar con los minerales en el granito, causando meteorización química y erosión.
En resumen:
El granito dura más tiempo en climas áridos donde está expuesto a fluctuaciones mínimas de humedad y temperatura. Sin embargo, es importante recordar que incluso en el clima más ideal, el granito eventualmente resistirá y se erosionará durante largos períodos.