Si bien no hay dos "partes" distintas de una manera que sea comparable a una cordillera con picos distintos, podemos descomponer las grandes llanuras en dos características geográficas principales que define su carácter:
1. Las llanuras altas: Esta porción occidental de las Grandes Llanuras se encuentra a una elevación más alta, con una topografía más resistente y colinas rodantes. Se caracterizan por condiciones semiáridas y vegetación escasa.
2. Las llanuras bajas: Esta porción oriental de las Grandes Llanuras es generalmente menor en elevación y más plano. El clima es más húmedo, apoyando pastizales más densos y actividades agrícolas.
Es importante tener en cuenta que estas no son divisiones definitivas, sino más bien una forma de comprender el cambio gradual en la topografía y el clima en la vasta extensión de las Grandes Llanuras.