1. Exploración y planificación: Esto implica encuestas geológicas, evaluaciones ambientales y la creación de un plan detallado de canteras. El objetivo es determinar el tipo y la calidad de la roca presente, evaluar la viabilidad de la extracción y minimizar el impacto ambiental.
2. Apertura y preparación: Esto implica despejar el sitio, excavar la sobrecarga (suelo y roca sobre la cantera) y establecer caminos de acceso, suministro de agua y líneas eléctricas. Esta etapa también implica establecer instalaciones de trituración y detección si es necesario.
3. Extracción: Este es el proceso real de eliminar la roca de la cantera. Esto puede implicar perforar, volar y/o excavar, dependiendo del tipo de roca y el método de extracción elegido.
4. Procesamiento y recuperación: Después de la extracción, la roca puede procesarse en diferentes tamaños y formas, dependiendo de su uso previsto. La recuperación implica restaurar el sitio de la cantera a un estado seguro y respetuoso con el medio ambiente. Esto puede implicar llenar la cantera con la sobrecarga, plantar vegetación y construir instalaciones recreativas.
Es importante tener en cuenta que los detalles de cada etapa pueden variar según el tipo de cantera, la roca que se extrae y la ubicación.